Hemos sido trasladados y librados
trasladar significa:
- Cambiar a una persona o una cosa de lugar.
- Hacer pasar a una persona de un cargo a otro de la misma categoría .
- Cambiar la fecha o la hora de un acto, una conmemoración o una fiesta trasladaron el concierto una semana después.
- Expresar una cosa en un idioma distinto al originario trasladó su novela al español.
- Hacer una copia de un escrito.
- Hacer una copia de un escrito.
- Mudar
Somos trasladados a la realidad de Dios. La Palabra nos dice que hemos sido trasladados al Reino del amado hijo.
Muchos no viven cómo si fueron trasladados a este Reino. Muchos lo esperan, para comenzar a vivir todo lo que Dios nos prometió. Sin embargo la Palabra nos dice claramente que ya hemos sido trasladados.
- El Reino es sanidad
- El Reino es abundancia.
- El Reino es poder.
- El Reino es autoridad.
- El Reino Es dominio.
- El Reino es paz y gozo.
- El Reino es luz.
- El Reino es sabiduría y conocimiento.
- El Reino es multiplicación.
- El Reino es amor.
- El Reino es alabanza y adoración.
- El Reino es Salvación.
Que se necesita para ser Trasladado a este Reino
- Nacer de Nuevo
“De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios” (Juan 3.4).
- Volverse como niño.
- Oir la Palabra y creer en el Padre.
Jesús dijo: “De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna, y no vendrá a condenación, más a pasado de muerte a vida” (JUAN 5.24).
Que beneficio tiene ser trasladado al Reino del Hijo
- Serás Cabeza, el primero, estarás encima. Pero tienes que obedecer.
(Deuteronomio 28:13) “Te pondrá Jehová por cabeza, y no por cola; y
estarás encima solamente, y no estarás debajo, si obedecieres los
mandamientos de Jehová tu Dios, que yo te ordeno hoy, para que los
guardes y cumplas,”
- Gobernarás la casa de Dios.
(Zacarías 3:6-7) “6 Y el ángel de
Jehová amonestó a Josué, diciendo:7 Así dice Jehová de los ejércitos:
Si anduvieres por mis caminos, y si
guardares mi ordenanza, también tú gobernarás mi casa, también guardarás
mis atrios, y entre éstos que aquí están te daré lugar.”
- Acabarás en bienestar y dicha.
(Job 36:10-12) “10 Despierta además el oído de ellos para la corrección, Y les dice que se conviertan de la iniquidad.Si oyeren, y le sirvieren, Acabarán sus días en bienestar, Y sus años en dicha. Pero si no oyeren, serán pasados a espada, Y perecerán sin sabiduría.”
- Servirás a Dios.
(Isaías 56:6) “Y a los hijos de los extranjeros que sigan a Jehová
para servirle, y que amen el nombre de Jehová para ser sus siervos; a
todos los que guarden el día de reposo para no profanarlo, y abracen mi
pacto,”
(Juan 12:26) “Si alguno me sirve, sígame; y donde yo estuviere, allí
también estará mi servidor. Si alguno me sirviere, mi Padre le honrará.”
- Será Honrado por Dios
- Será Sacerdote de Jehová, conmerás las riquezas de las naciones y tendreis su gloria.
(Isaías 61:6-9) “6 Y vosotros seréis llamados sacerdotes de Jehová, ministros de nuestro Dios seréis llamados; comeréis las riquezas de las naciones, y con su gloria seréis sublimes.
7 En lugar de vuestra doble confusión y de vuestra deshonra, os alabarán en sus heredades; por lo cual en sus tierras poseerán doble honra, y tendrán perpetuo gozo.
8 Porque yo Jehová soy amante del derecho, aborrecedor del latrocinio para holocausto; por tanto, afirmaré en verdad su obra, y haré con ellos pacto perpetuo.
9 Y la descendencia de ellos será conocida entre las naciones, y sus renuevos en medio de los pueblos; todos los que los vieren, reconocerán que son linaje bendito de Jehová.”
- En la Potestad de las tinieblas la gente está muerta en sus pecados.
(Efesios 2:5) “5 aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos),
- Cuando somos trasladados al Reino del amado Hijo fuimos resucitados.
7 para mostrar en los siglos venideros las abundantes riquezas de su gracia en su bondad para con nosotros en Cristo Jesús.”
- Cuando somos trasladados al Reino del amado Hijo fuimos sentados en lugares celestiales.
- Cuando somos trasladados al Reino del amado Hijo estamos escogidos para mostrar las riquezas abundantes de su gracias en los siglos venideros.
- Cuando somos trasladados al Reino del amado Hijo somos renacidos para una esperanza viva.
tenemos una herencia que no tiene precio, una herencia que está reservada en el cielo para ustedes, pura y sin mancha, que no puede cambiar ni deteriorarse.
Así nos dio la plena esperanza de recibir una herencia que Dios tiene guardada para nosotros en el cielo; herencia que no se arruina, ni se destruye, ni pierde su valor.
Palabra de Dios para Todos (PDT)
- Cuando somos trasladados al Reino del amado Hijo somos renacidos para herencia incorruptible incontaminada e inmarcesible, reservada en los cielos para vosotros.
- El Reino del Hijo Amado no será jamás destruido, ni será el reino dejado a otro pueblo; desmenuzará y consumirá a todos estos reinos, pero él permanecerá para siempre
(Colosenses 1:13) “el cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado al reino de su amado Hijo,”
- Para los que han permanecido en las pruebas El Hijo Amado también les asignará un Reino.
(Lucas 22:28-30) “28 Pero vosotros sois los que habéis permanecido conmigo en mis pruebas.
29 Yo, pues, os asigno un reino, como mi Padre me lo asignó a mí,
30 para que comáis y bebáis a mi mesa en mi reino, y os sentéis en tronos juzgando a las doce tribus de Israel.”
- Para los que han permanecido en las pruebas comerán y beberan en la mesa del Hijo.
- Los que son trasladados recibirán el reino, y poseerán el reino hasta el siglo, eternamente y para siempre.
(Daniel 7:18, 21-22, 27) “18 Después recibirán el reino los santos del Altísimo, y poseerán el reino hasta el siglo, eternamente y para siempre.
21 Y veía yo que este cuerno hacía guerra contra los santos, y los vencía,
22 hasta que vino el Anciano de días, y se dio el juicio a los santos del Altísimo; y llegó el tiempo, y los santos recibieron el reino.
27 y que el reino, y el dominio y la majestad de los reinos debajo de todo el cielo, sea dado al pueblo de los santos del Altísimo, cuyo reino es reino eterno, y todos los dominios le servirán y obedecerán.”
- No tienes porque temer, ha Dios le ha placido darte el reino.
(Lucas 12:32) “32 No temáis, manada pequeña, porque a vuestro Padre le ha placido daros el reino.”
(Mateo 25:34) “34 Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo.”
(Hebreos 12:28-29) “28 Así que, recibiendo nosotros un reino inconmovible, tengamos gratitud, y mediante ella sirvamos a Dios agradándole con temor y reverencia; 29 porque nuestro Dios es fuego consumidor.”
(Apocalipsis 1:9) "Yo Juan, vuestro hermano, y copartícipe vuestro en la tribulación, en el reino y en la paciencia de Jesucristo, estaba en la isla llamada Patmos, por causa de la palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo."
(2 Timoteo 2:19-21) "19 Pero el fundamento de Dios está firme, teniendo este sello: Conoce el Señor a los que son suyos; y: Apártese de iniquidad todo aquel que invoca el nombre de Cristo.
20 Pero en una casa grande, no solamente hay utensilios de oro y de plata, sino también de madera y de barro; y unos son para usos honrosos, y otros para usos viles.
21 Así que, si alguno se limpia de estas cosas, será instrumento para honra, santificado, útil al Señor, y dispuesto para toda buena obra."
“Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos” (Mateo 5.5).
“Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos” (Mateo 5.10).
“No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos” (Mateo 7.21).
“No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios. Y esto erais algunos; mas ya habéis sido lavados (...) por el Espíritu de nuestro Dios” (1 Corintios 6.9-11).
“…como hijos obedientes, no os conforméis a los deseos que antes teníais estando en vuestra ignorancia, sino, como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir, porque escrito está. Sed santos, porque yo soy santo. Y si invocáis por Padre a aquel que sin acepción de personas juzga según la obra de cada uno, conducíos en temor todo el tiempo de vuestra peregrinación; sabiendo que fuiste rescatados de vuestra vana manera de vivir”. Que condición más reveladora y sencilla. Si estas en el reino de Dios, entonces tienes que vivir de acuerdo al rey del reino. Si el Rey es santo, entonces los súbditos deben ser santos. 1 Pedro
(Mateo 25:34) “34 Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo.”
(Hebreos 12:28-29) “28 Así que, recibiendo nosotros un reino inconmovible, tengamos gratitud, y mediante ella sirvamos a Dios agradándole con temor y reverencia; 29 porque nuestro Dios es fuego consumidor.”
(Apocalipsis 1:9) "Yo Juan, vuestro hermano, y copartícipe vuestro en la tribulación, en el reino y en la paciencia de Jesucristo, estaba en la isla llamada Patmos, por causa de la palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo."
- Los que son trasladados al Reino del Amado Hijo deben apartarse de iniquidad.
(2 Timoteo 2:19-21) "19 Pero el fundamento de Dios está firme, teniendo este sello: Conoce el Señor a los que son suyos; y: Apártese de iniquidad todo aquel que invoca el nombre de Cristo.
20 Pero en una casa grande, no solamente hay utensilios de oro y de plata, sino también de madera y de barro; y unos son para usos honrosos, y otros para usos viles.
21 Así que, si alguno se limpia de estas cosas, será instrumento para honra, santificado, útil al Señor, y dispuesto para toda buena obra."
“Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos” (Mateo 5.5).
“Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos” (Mateo 5.10).
“No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos” (Mateo 7.21).
- No Basta con llamar a Jesucristo Señor, Hay que manifestar que estamos viviendo en ese Reino.
“No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios. Y esto erais algunos; mas ya habéis sido lavados (...) por el Espíritu de nuestro Dios” (1 Corintios 6.9-11).
“…como hijos obedientes, no os conforméis a los deseos que antes teníais estando en vuestra ignorancia, sino, como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir, porque escrito está. Sed santos, porque yo soy santo. Y si invocáis por Padre a aquel que sin acepción de personas juzga según la obra de cada uno, conducíos en temor todo el tiempo de vuestra peregrinación; sabiendo que fuiste rescatados de vuestra vana manera de vivir”. Que condición más reveladora y sencilla. Si estas en el reino de Dios, entonces tienes que vivir de acuerdo al rey del reino. Si el Rey es santo, entonces los súbditos deben ser santos. 1 Pedro
“Y en los días de estos reyes el Dios del cielo
levantará un reino que no será jamás destruido, ni será el reino dejado a otro
pueblo; desmenuzará y consumirá a todos estos reinos, pero él permanecerá para
siempre” (Daniel 2.44).
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